viernes, 20 de noviembre de 2009

Disculpa

Hoy, querida amiga, no me has robado nada.
Hoy me has dejado tu calor.
Tu chaquetita se ha quedado.
Tu vuelta es próxima.
No nos dejamos algo por gusto.
Los enigmas de nuestra mente nos hacen volver.
Son los espíritus en forma de objetos, los que marcan un camino.
Ese que nos hace conocer nuestro tiempo y nuestro espacio.
Por eso dejamos un rastro.
Y ese es nuestro subconsciente.
Ese que nos tiene tan atados, que desenvolver las ataduras, nos conduce a un espacio del que recuperarnos, nos costara el continuar un camino que no nos habíamos planteado.
Pero que nuestro subconsciente ya lo había oteado.
Luego, solo tenemos que dejarnos guiar.
Por el destino programado y dirigido por ondas que no conocemos.
Pero que indudablemente nos conducen a buen puerto.
Y, con la condición no buscada.
No nos preguntaremos.
El ¿porque?

No hay comentarios: